Reseña:
“Harry Potter y la
piedra filosofal” de J.K. Rowling.
Título original: “Harry Potter and the Philosopher's Stone”
Año de publicación:
1997.
Serie: Harry Potter
#1.
Siguiente libro: La cámara secreta
RELECTURA
DE HARRY POTTER. Como compré la serie de Harry Potter al fin este año, decidí
hacer una maratón de lectura en donde intentaría absorber la magia del mundo
creado por Joanne Rowling.
Edición: 2016 de
Salamandra.
Cantidad de
páginas: 256.
Tapa: Rustica con
solapas.
Reseña: Harry es un chico de diez años que vive
con sus tíos Dursley y su primo Dudley, en el lugar más normal del mundo,
porque sus padres murieron cuando era un bebé. Harry no sabe mucho de ellos, ni
de su muerte, salvo que fue en un accidente. En la casa de los Dursley lo
tratan muy mal: le dan poca comida, lo visten con las prendas viejas y enormes
del gordo y fastidioso primo Dudley, lo regañan por todo y hacen que duerman
debajo de la escalera, en un minúsculo cuarto, si es que se puede llamar así.
Un día cualquiera en la vida de Harry, llega con la correspondencia a la casa
donde vive, una carta para él. ¿Quién sería el emisor de la carta? Nunca pudo
averiguarlo, porque Tío Vernon le arrebató la carta y la destruyó. Aunque intentaron
escapar de las cartas, estas siempre encontraban a Harry en cualquier lugar en
que esté.
La
noche de su cumpleaños número once, llega a la cabaña sucia y desvencijada en
el medio del mar donde ahora viven para huir de las cartas, un hombre enorme
llamado Hagrid, quien asegura que Harry es un mago y le entrega su carta
preciada. Es nada más y nada menos que una carta de Hogwarts, el Colegio de
Magia y Hechicería, y quieren que Harry asista. Escapando de los Dursley,
nuestro protagonista se encamina a una aventura con Hagrid en el callejón
Diagon para comprar sus útiles escolares, un callejón muy peculiar y mágico,
donde todos parecer conocer a Harry.
Lo
mismo sucede cuando Harry pisa Hogwarts, todos allí lo conocen, todos han oído
su nombre, ya que Harry es el «niño que vivió», aquel que sobrevivió a la
muerte.
En
su año escolar descubre a muchos amigos, algunos enemigos y dones muy
especiales que se encuentran dentro de sí, como el quidditch. Pero Hogwarts no
es normal, no solo porque es una escuela para hechiceros, sino que nunca se
tiene un año especialmente tranquilo y académico, y no lo será desde que Harry
pone su pie en ella.
Opinión
personal: ¡Oh, Harry
Potter, que maravilla! Bien, dejenme divagar.
No
fui de los que leyeron Harry Potter cuando eran pequeños, más bien mi historia
con la franquicia comienza con las películas, pero un poco tarde, ya casi
cuando salía “Las reliquias de la muerte, parte 1”; sin embargo, de niña había
visto muchas veces las dos primeras, recuerdo que mi madre no me dejaba ver “El
prisionero de Azkaban” porque decía que iba a asustarme. Después de aprenderme
las películas de memoria decidí de una vez leer los libros. Y me decepcioné un
poco. Estaba muy cerrada en ese momento, así que no me permití disfrutar del
mundo como Joanne lo había planteado. Lo que más me decepcionó, supongo, fue el
personaje de Harry, me gustaba tanto en las películas, y lo odié tanto en los
libros. Por eso decidí leerlos de nuevo pero con más calma, mucha más calma,
sin apuros y disfrutando de cada detalle. Dejé de lado otras lecturas, como las
de Sherlock Holmes, para entregarme de lleno a esta saga.
Y
qué bueno que lo hice, aunque recién voy el primer libro.
En
esta reseña habrá algunos spoilers para aquellos que no saben nada de Harry
Potter, y quizá para los que no leyeron todos los libros o vieron las películas
también. Muchos de los puntos que voy a tratar fueron discutidos en el vídeo de
la relectura de este libro en el canal de Lenabya Books, en youtube, donde
también comenté de manera resumida lo que pondré aquí.
La
edición en que estoy leyendo Harry Potter es la nueva sacada por Salamadra en
2016, les dejaré algunas fotos. Es preciosa, tiene un mapa de Hogwarts y todo.
Me gustó mucho. Además, tiene una nota al final del libro del editor que aclara
que en esta edición se incorporaron los
diferentes nombres de especies de lechuzas y búhos, como en la versión inglesa,
y no se catalogaron a todos como una misma especie.
Empecemos
por lo malo. Que no es tan malo. Aunque la trama me parece estupenda y muy
curiosa, me parece que no está muy bien llevada. ¿Por qué? El ritmo es muy
rápido, las cosas suceden de manera apresurada y al final tuve que leer más
lento de mi ritmo habitual y releer los párrafos para disfrutar mejor las
escenas. Considero al decir esto que el libro está pensado para el público
infantil, y quizá por eso sea una escritura más sencilla de la que, me parece a
mí, debería tener el libro. Siento que me faltan algunas descripciones en
ocasiones y la resolución de algunos problemas me parece muy rápido, como es la
trama de Norberto, el dragón, y el momento en que Ron, Hermione y Harry deciden
ir por la piedra; principalmente la parte en la que Harry al fin descubre
algunas verdades y se enfrenta a Lord Voldemort. Se supone que este es un
villano terrible y que ha matado mucha gente, y aunque está débil, Harry no
debería haber acabado con él tan fácil, esperaba más lucha, o no sé. El partido
de Quidditch también es muy rápido, pasan un poco la pelota, hechizan a Harry,
Hermione lo salva y mientras ella vuelve a su asiento prácticamente Harry ya
ganó, pero como no es contada desde su perspectiva el hecho de que se tragó la
snitch, me resultó menos emocionante. Por otra parte, hay hechos que me
parecieron muy convenientes, como que Dumbledore le diera al final tantos
puntos a el trío que ya mencioné y a Neville, de forma que pasaron a Slytherin,
que justo que Dumbledore haya sido de Griffindor como los niños a los que
puntuó, se me hizo que es un final DEMASIADO feliz, las cosas terminaron muy
bien. Por esto, más que nada, es que no me parezca que la pluma de la autora
sea tan maravillosa como algunos dicen.
Más
allá de eso, siempre esta autora nos brinda muchos guiños que nos parecen
pequeños o nos pasan desapercibidos, que se tratan en otros libros,
especialmente en el último, y para no olvidarme de ellos los fui anotando a
medida que iba leyendo, se los recomiendo. Aunque en un principio eran libros
para niños, Joanne los pensó detalladamente, todo encaja y ningún dato, por lo
general, es porque sí. Esto es algo que me fascina, como un autor puede
elaborar de tal forma su obra que todo encaje, que todas las preguntas sean
respondidas, aunque sean años después, cómo aunque sean en frases pequeñas,
como la de “... Dumbledore es particularmente famoso por derrotar al mago
tenebroso Grindelwald,
en 1945...” en donde nos revela infinidad de cosas y tramas.
Sobre
el mundo, es hermoso. Una de las cosas que más me gusta de Harry Potter, como
saga, es su mundo. Creo que es un mundo muy bien construido, demasiado, es de
los mejores mundos que he leído. Por lo general los autores al escribir una
novela o saga lo que hacen es tomar dos o tres aspectos fantásticos y eso
forman su obra, pero Rowling toma elementos de muchísimos ámbitos. Mezcla criaturas
místicas, como los dragones, mitológicas, como los centauros, encantamientos,
hechizos, reglas para una sociedad entera, entre otras cosas. Me gusta mucho
más el vestuario en la película que en el libro, releyéndolo me di cuenta que
Dumbledore se viste de manera muy extravagante (casi casi como Magnus Bane) y
que el uniforme de los alumnos es una simple túnica más bien capa, mientras que
en la película el uniforme consta de la capa, camisa, corbata y/o bufanda del
color de la casa en la que pertenezcas, pantalones o polleras, entre otras
cosas.
Los
personajes están construidos de forma excelente, con mucha calidad. No importa
si es malo, bueno, insoportable, tierno, no importa, todos tienen un rasgo
característico que lo diferencia de los demás. En este primer libro, al ser
desde la perspectiva de Harry teniendo solo once años muchos de los adultos
están en cierta forma caricaturizados: Snape es el irrefutablemente malo,
McGonagall es la severa y estricta, Dumbledore el ídolo y héroe de muchos, también
sucede con otros. Una de las cosas por las que más me conmovió el libro y me
produjo nostalgia, son los personajes. Es hermoso ver cómo tal personaje se
volverá un héroe, o este un villano, o este otro que morirá, por ejemplo cuando
nombraron a Lavender y enseguida recordé el libro seis donde es novia de Ron.
Comencemos
con Harry. La primera vez que leí la saga me decepcioné mucho con Harry, tenía
una imagen mucho más tierna, valiente y comprensiva de él por las películas,
cuando en realidad al leer los libros me pareció arrogante, pedante e
indiferente a las demás personas que no fuera él, por ejemplo, cuando Hermione
y Ron se peleaban en una escena intensamente (no recuerdo si era el libro seis)
Harry no interviene para nada, y a mí me parece mal, pero esa es de las cosas
más sencillas. Leyéndolo ahora y poniéndole más cuidado no me pareció tan así,
pero por supuesto, ahora no es más que un niño. Sin embargo, sí me parece un
poco orgulloso y arrogante; en especial me molesta todo el trasfondo que tiene
para que los lectores sintamos lástima por Harry: por ser huérfano, por vivir
con unos tíos que no lo quieren (o al menos que no demuestran su amor), desear
que alguien lo salve de ésta familia, entre otras cosas; nunca sentí pena por
Harry, no sé exactamente por qué, supongo que por precisamente por su actitud
altanera. En “La piedra filosofal” lo vi como un niño en busca de aventuras,
que al fin tiene amigos, pero ese es otro de los puntos de Harry, para ser
alguien que nunca tuvo un solo amigo, no los trata tan bien como debería, más
que nada a Hermione, aunque a Neville siempre lo apoya mucho. Otro de los
fallos en él es que, en mi opinión, se acostumbra demasiado rápido al mundo
mágico y ya no se asombra por él de la forma en que haría un niño de once años
que recién lo descubre; si yo, teniendo diecisiete años me maravillo, Harry
debería maravillarse un poco más. En las escenas sobre el espejo de Oesed y
Harry, sí me da mucha ternura y pena por él, ya que tiene frente a sí todo lo
que desea, pero no puede alcanzarlo, y debe ser de los peores sentimientos que
alguien puede sufrir.
Ron
es un personaje que le falta carisma, siempre se ve opacado por Hermione y
Harry, me parece que hay pocos momentos, por ejemplo en el séptimo libro cuando
destruye el guardapelo, en donde brilla por su propia cuenta. Me da muchísima
lástima su trasfondo, más que el de Harry incluso, es el hermano varón menor de
la familia Wesley, de cinco varones y Ginny, la única niña, y siempre recibe lo
que ellos ya han usado: ropa, varitas, mascotas, entre otras cosas; siento que
al ser el menor además de ser el que recibe lo peor, es también el que se
siente menos amado o menos reconocido, ya que aunque Ron quiere hacer algo que
haga sentir orgullosos a sus padres, todo lo que puede hacer ya lo han hecho
sus hermanos. Ser amigo de Harry podría darle las formas para sorprender a sus
padres y su familia y sentirse único, pero entonces viene Harry, siendo el
elegido y esas cosas, y lo opaca un
montón, y luego está Hermione, quien es mejor bruja de lo que Ron será jamás.
En este libro, sin embargo, me parece que tiene algunas escenas en donde logra
ser “mejor” que Harry, como cuando están abriendo los regalos de navidad y
tiene más que él, ya que tiene una familia, o en la trama de Norberto, donde
debe ponerse en contacto con su hermano Charlie para que se lleven al pequeño
dragón antes de que sea demasiado tarde; en cambio es opacado otra vez porque
debe ir a la enfermería y al final son Harry y Hermione quienes se ocupan del
dragón.
Acerca
de Hermione. Odio a Hermione en todas
las películas, se me hace MUY pesada, siempre intentando que la gente sea como
ella o manejar sus vidas, y creo que mucha gente la idealiza, la creen perfecta
por alguna razón (principalmente porque está protagonizada por Emma Watson,
quien tampoco me gusta para nada); pero en el libro no me parece insoportable,
solo una niña que le gusta estudiar y tiene unos valores diferentes a los
demás, principalmente en el ámbito del estudio, y llega a ser un poco maternal
y cariñosa con sus amigos a veces. Hasta me gustó en el libro, de los tres creo
que es la que más me gustó. Muchas personas consideran que evoluciona mucho en
el libro, ya que deja de ser una niña mandona a estar más tranquila con Harry y
con Ron, pero a mí no me parece así, creo que simplemente se comporta con sus
amigos con confianza, se preocupa por ellos, les tiene cariño, y ese tipo de
cosas, que antes no sentía porque simplemente no eran amigos y ya, no porque
sea una persona diferente, ni porque haya cambiado; en esto también influye la
visión que se nos presenta de la niña a través de los ojos de Harry, que cambia
(la visión) cuando comienzan a ser amigos.
Sobre
los Dursley, no los odié tanto en este libro como me pasaba antes o en las
películas, me parecieron más bien tontos o un poco exagerados, su
caricaturización, con respecto a los demás personajes. Me parece que hay que
darles un voto de fe, porque ellos pudieron elegir no criar a Harry y sin
embargo lo hicieron, más allá de que lo trataran mal, le dieran poca comida,
poca agua y nada de ropa, etc. ellos lo criaron, no sé si muchos ven la
magnitud de eso, de criar a un niño, sobre todo si no es tuyo. Harry, por lo
menos hasta el momento en que entró en Hogwarts, es como es en parte gracias a
los Dursley.
Siempre
veo a Hagrid como el verdadero protector de Harry, el que siempre ve por él sin
ningún interés aparte, como Dumbledore, y siempre está cuando lo necesita.
Muchos prefieren a Sirius como su figura paterna, pero yo prefiero a Hagrid, ha
estado con él en sus momentos más preciados: lo rescató de su casa cuando era
un bebé y lo llevó a salvo con los Dursley, le dio su primer pastel de
cumpleaños, su carta de Hogwarts y lo recató de sus tíos, le compró a Hedwing,
le dio el álbum de fotos de sus padres e infinidad de cosas que pertenecen a
los siguientes libros. Hagrid aparece muchísimo en este libro, y me gustó ver
su relación de confianza con Harry, y después con Hermione y Ron. Sin duda,
Hagrid es una joya.
Neville es uno de mis personajes favoritos y ver como ese chico, al que todo le sale mal y al que podemos considerar como al más desafortunado del mundo, se convierte después en un hombre valiente, me encanta. No está en el libro tan estereotipado como en la película, donde es el “niño tonto”, en “La piedra filosofal” no es tan así, solo un niño un poco tímido. Me encanta como Ron y Harry siempre le dan fuerzas, diciéndole que vale muchos Malfoys.
Respecto
a Draco, todavía podemos ver la inocencia en él, es malvado y arrogante como un
niño de once años podría serlo, acusándolos con los profesores y haciendo
travesuras, pero nada más. Draco es otro de mis personajes favoritos, y el
hecho de que tome la decisión “correcta” al final de la saga me llena de
orgullo, por su valentía.
Amo
a Fred y George. Son muy divertidos, sin ser groseros, más bien de esa
diversión pura y sin maldad que me hace encariñarme mucho con ellos. Lo que me
gustaría es que se los diferenciara un poco más, que no sean como una misma
persona pero con nombres diferentes, sino que se sepa quién es George solo con
escucharlo (leerlo, ejem) y quién es Fred.
La
profesora McGonagall no se luce tanto en este libro, pero aun así me encanta.
Siempre que aparece les corta el mambo a todos, aunque tiene sus momentos de dulzura
y se nota que quiere mucho a sus alumnos.
Todos
estos personajes que voy nombrando son a los que seguiré con cuidado a lo largo
de la saga, además de los que se incorporen.
Le
puse especial cuidado a las escenas de Snape, a las de Quirrell y también a las
de Dumbledore, para apreciar los pequeños detalles que J.K Rowling nos brinda
de cada uno. Quería ver todas esas pequeñas pistas que la autora nos brinda de
sus verdaderas intenciones y personalidades, y de sus finales. Y hay mucho
material, que en la primera lectura se te escapa.
Dumbledore
no aparece mucho, pero las veces que lo hace es imposible no notar toda la
admiración que los personajes sienten por él. Además, me di cuenta que es un hombre
un poco loco, que parece hasta gracioso, como si fuese un viejo chiflado o
algo. Me dio gracia en especial su atuendo violeta con estrellas. Respecto a
Dumbledore y su visión en el espejo de Oesed, leí por algún lado que cuando se
ve al espejo se contempla con su familia reunida, pero en paz y fuera de peligro,
ya que su familia siempre fue medio caótica, aunque quizá sí se ve con
calcetines nuevos como dice en el libro, o con calcetines nuevos junto a su
familia.
Quirrell
en las escenas que aparece, da la sensación de ser una víctima, pero como yo ya
sé que no lo es, puse atención en las interacciones que se pueden tomar como
las de una presa y no las de una fiera. No es muy obvio, la autora lo armo todo
de forma que realmente fuese una sorpresa al final. Me quedan muchas dudas de
cómo es que Voldemort se encontró con Quirrell, qué fue lo que le dijo para que
aceptara trabajar para él y cómo se unieron. Lo anoté todo, para poder
encontrar mi respuesta, si es que se dice, en las películas siempre me ha
quedado la duda.
Snape
es un personaje un poco bipolar, no, mentira. Es muy interesante ver cómo trata
mal a sus alumnos, siempre privilegiando a Slytherin, y al mismo tiempo ser
testigo de cómo ayuda a Harry en el partido de Quidditch con un contra-hechizo,
y la vez que decide ser arbitro para protegerlo más de cerca, entre muchas
otras cosas, como que va al tercer piso a proteger la piedra en Halloween. Me
parece un poco aniñado o más bien inmaduro privilegiar a Slytherin, siendo un
adulto, pero es gracioso también; quizás lo hizo así la autora en un principio
para representar a esos malos profesores que todos tenemos y que siempre
privilegian a nuestros enemigos.
Esta
reseña se hizo muy larga. ¡Es todo por hoy! Gracias a los que leyeron toda la
reseña, pueden dejarme sus opiniones en los comentarios.
¡Nos
leemos!
Valentine.