sábado, 23 de septiembre de 2017

Reseña: Te daría el Sol

Reseña:

“Te daría el Sol” de Jandy Nelson.

Datos:
Título original: “I'll Give You the Sun”.
Año de publicación: 2014.
Libro autoconclusivo.

Reseña: La historia se cuenta a través de dos perspectivas: la de Noah y la de Jude. La perspectiva de Noah es de cuando ambos tenían entre trece y catorce años, y la perspectiva de Jude cuenta la actualidad, cuando tienen dieciséis. Noah y Jude son hermanos gemelos y de niños fueron inseparables, pero su competitividad por el amor de sus padres y destacar entre ellos los llevó a tomar decisiones y realizar acciones que lastimaron a muchas personas, además de a ellos mismos. Mientras que Noah nos cuenta los hechos que llevaron a su distanciamiento, tanto lo que hizo mal Jude como lo que hizo mal él, y otras cosas que pasaron en el camino de su crecimiento, Jude nos relata cómo intenta volver a unir a su familia, encontrarse a sí misma y a su hermano, que ya no son lo que eran, entendiendo primero que nada que ellos no son una persona sola como solía creer, sino que son dos individuos separados y que eso está bien.

Opinión personal: No esperaba nada del libro. Él estaba ahí, en mi lista de lectura, yo quería leer algo ligerito y decidí comenzarlo. Me alegro de haberlo hecho. “Te daría el Sol” es uno de esos libros que llegó en el momento justo a mí vida, me brindó mucha paz, mucho consuelo. No esperaba nada de él debido al hype que lo rodeaba, por lo general dicho hype hace que mis expectativas sean demasiado altas y después el libro, a pesar de ser malo o bueno, no llega a tales expectativas. Me pasó lo mismo con “Eleanor y Park”, lo bueno es no comenzar un libro con expectativas porque te va a sorprender enormemente. ¿Qué hizo que me guste tanto? Vamos a ello.



Cuando escuché que se narraba como Jude moldeaba sus esculturas y cosas por el estilo, me dije: que aburrido. Pero no fue nada aburrido, no es que se pase dos capítulos narrando esto como yo pensaba, el arte no está en el libro para llenar un espacio, para decir: mis personajes hacen esto, y ya; no, el arte son los personajes, los personajes son arte. Todo lo que tiene que ver con el arte, tanto en la pintura para Noah o para su madre, como en la escultura para Jude y Guillermo, o la fotografía para Oscar, todo está relacionado y en el momento y lugares justos, son parte de los personajes, tanto es así que Noah piensa pintando, cuando se imagina algo se imagina a sí mismo pintándolo. Lo que me encantó es que conocía a la mayoría de los artistas y cuadros o estilos que nombraban, así que yo estaba al estilo: «Este es mi lugar», creyéndome toda una experta, aunque nada que ver.
Yo pensaba que en la historia pasaban cosas más graves, no es tan así, aunque lo que le pasa a todos los personajes es muy chocante, más que nada por la forma en la que está contado. Al principio las riñas entre Jude y Noah me parecieron un poco bobas, pero estas iban subiendo de tono, y yo realmente me ponía en su lugar (cosa que nunca me pasa), sufría como lo hacían ellos porque me parecía muy fuerte lo que les estaba pasando, ningún niño de trece años piensa en la forma que ellos dos y parecía que exactamente esa forma de pensar, más que nada de parte de Noah (no sé cómo pensaba Jude a los trece años, así como no sé cómo piensa Noah a los dieciséis) agravaba las cosas. Para algunas personas les pareció poco lo que les pasaba, pero yo me imagino teniendo trece años, o teniendo dieciocho como ahora, y me duele igual, me parece horrible.
Sí que el final me pareció muy conveniente, digo, todo terminó bien, como un cuento de hadas. Yo pensaba: «bueno, este no logró lo que quería, pero al menos ahora es feliz...», en cambio sí lograba lo que quería.

La escritura y la lírica, la forma de contar la historia, es asombrosa. Creo que eso es lo que más me llegaba al corazón, porque no es muy común que alguien sienta de esa forma, que sienta el arte en las venas como me logró trasmitir Jandy Nelson, sus palabras son preciosas. Era un placer leer todo, tiene un estilo único, no quería terminar el libro porque no quería separarme de tal estilo. Estoy ansiosa ahora por comprármelo y poder leerlo de nuevo, porque los pensamientos en pintura de Noah me fascinaron. Es increíble.

En cuanto a los personajes, todos me parecieron sacados de un cuento a la vez que muy humanos. ¿Por qué sacados de un cuento? Porque tenían intereses o hobbies realmente extraños, o formas de pensar o ser extravagantes. Pero sus sentimientos me parecían muy humanos, creo que cualquier persona podría tener esos sentimientos.



Noah se volvió uno de mis personajes favoritos. Si bien debo admitir que no es el mejor personaje logrado en la literatura, lo que me hizo sentir fue increíble. Aunque no haya pasado por lo que Noah sí, realmente podía sentir su dolor y podía sentir su alegría. Además, la forma de pensar y ver el mundo de Noah es alucinante, realmente. Es de esas personas que te encuentras en la vida y sabes que es diferente de verdad, que ha logrado ir más allá; a Noah no le gusta el arte, Noah es arte, siente y vive el arte. Si yo pudiese ver el mundo como Noah, creo que me asustaría muchísimo, pero también me maravillaría.
Si hablamos de cómo es Noah, es un chico al que le gustan otros chicos, y eso lo asusta; es un chico que por pensar como lo hace no tiene muchos amigos, hasta los catorce su única amiga fue su hermana Jude. Es un chico inmensamente sensible, que sólo sabe expresarse a través de la pintura, y muy introvertido. Creo que a veces Noah no sabe cómo hablar con los demás o expresarse, tiene tanto que decir pero dice tan poco; es como si le fuera más fácil pintar o dibujar que comunicarse verbalmente.

Jude no fue mi personaje favorito, y creo que es así para la mayoría, principalmente porque es una egoísta. Sí considero que fue Jude quien comenzó la guerra entre ella y su hermano, y que fue Jude quien hizo las peores cosas en contra de Noah, hasta el punto de arruinar su futuro. No diría exactamente que es extrovertida, creo que dice las cosas que ella considera que debe decir, pero no las que siente realmente, intenta gustar a los demás y por eso hace lo que hace. La Jude del presente, principalmente, se viste de forma ancha, se ha cortado su cabello, entre otras cosas, para no llamar la atención de los hombres; esto me parece bastante estúpido en realidad, pero capaz porque no es algo que me pase a mí, la gente que es carismática o bonita por naturaleza siempre destaca de entre las demás, y esa es Jude. Mis capítulos favoritos fueron obvio los de Noah, pero los de Jude me gustaron bastante igual, por sus particularidades (ya que se podría decir que Jude es bastante diferente al resto también) y porque ella lo que más quiere en el mundo es redimirse, es sacar de su interior la culpa, la tristeza y el enojo que la embarga. Y eso me pareció muy fuerte, porque habla mucho de ella, y porque me sentí muy identificada, sólo que yo no lograría nada esculpiendo una piedra. Lo que más me gustó de Jude fue su empatía, es algo que pocos logran.

Brian es el nuevo vecino de Jude y Noah, que pasa los veranos con su madre, la vecina de los hermanos. Como los dos anteriores, también creo que es muy humano, por sus miedos, por sus acciones y decisiones. Me enoja porque las decisiones que tomó por sus miedos lastimaron muchísimo a Noah, pero aun así entiendo por qué las tomó. En sí el personaje no me agradó ni desagradó, era inmensamente tierno con Noah, pero cuando estaban solos, entonces no es algo que cuente mucho para mí.

Odié a Oscar con toda mi alma. Sí, sé que es encantador. Y sí, sé lo mucho que sufrió, pero eso no es excusa para hacer la mayoría de las cosas que hizo. Iba hacia adelante y atrás todo el tiempo, y aunque la autora intentara decir: «es que hace esto por esto», me supo mucho a After (porque básicamente era así). De decir «es que te amo» y besarse con otra chica a los diez minutos. ¿Qué diablos pasa contigo? Lo peor es el estúpido enamoramiento de Jude por él. Ah, no dije quién era. Oscar es un modelo que trabaja con Guillermo, el nuevo maestro de Jude en escultura. Pero es, o era, un alcohólico.



Guillermo me gustó mucho. Me pareció raro que todos en el libro digan que era una bestia, un alunado, un agresivo, y siempre tratara a Jude y Oscar, incluso a Noah, con tremenda dulzura. Nunca vi en él la agresividad a la que se referían. También me pareció raro que si bien Guillermo no aceptaba alumnos, acepte a Jude de un día para el otro, más allá de los argumentos de ella. Fue un poco contradictorio eso, es como: «el personaje es agresivo y antipático, no quiere a nadie, pero como Jude es la protagonista, la va a querer». Eso no me gustó, me pareció incoherente o muy conveniente. Pero en sí el personaje me gustó muchísimo, se vio inmerso en tremendo enredo por amor y a pesar de todo su dolor por este, continúa amando.

Diana, la madre de Jude y Noah, no es un personaje que yo quisiera mucho, principalmente porque hacía diferencia entre sus hijos, prefiriendo a Noah porque le gusta el arte tanto o más que a ella. El conflicto más importante gira en torno a ella. Aunque se habla mucho de Diana, no siento que la haya conocido para nada, no creo que ningún personaje la haya conocido, todos tenían una visión diferente de Diana según la relación que tenían con ella, y eso sí me gusta porque así es en la realidad: nunca somos exactamente iguales con todas las personas y como dichas personas tienen opiniones diferentes nunca vamos a ser de la misma forma para una u otra. Así que vemos todas las facetas de Diana según la persona que esté hablando sobre ella, fue bastante interesante.

Benjamín es el padre de Noah y Jude. Es un padre bastante ausente, en realidad. Creo que no sabe exactamente cómo comportarse con sus hijos, tan particulares, e incluso su esposa, igual de particular. Primero lo vemos desde la perspectiva de Noah, que habla de cómo su padre no lo acepta como es, a pesar de que con el tiempo su relación va mejorando mucho, pero sólo porque Noah comienza a cambiar. Desde la perspectiva de Jude, es un padre muy ausente, Noah y ella están pasando por un momento horrible, un momento en que ya no saben quiénes son, y su padre no los guía, se encierra en sí mismo. No es un personaje que haya odiado, de todas formas, simplemente me pareció un hombre muy inútil, pero al fin y al cabo muy real por eso, porque los padres no son perfectos y a veces no saben qué hacer para que sus hijos se sientan mejor porque ellos también son humanos y se sienten perdidos en ocasiones.

En conclusión, me pareció un libro muy hermoso por su arte, por su forma de narración y por sus personajes tan reales. Me encantó.


Valentine.

domingo, 10 de septiembre de 2017

Reseña: Akatsuki no Yona

Reseña:
“Akatsuki no Yona” de  Mizuho Kusanagi.

Datos:
Título original:暁のヨナ
Año de publicación: 2010
Serie: Akatsuki no Yona
Tomos publicados hasta la fecha (10/09/17): 24.

¡Hola! Hoy traigo al blog algo un poco diferente, se trata de un manga que me ha obsesionado desde que vi su adaptación al anime desde el año pasado. Lo peculiar de esta reseña es que no me voy a referir a un solo tomo, sino a los 23 que van publicados, ya que no recuerdo que pasa en cada tomo y además estos son muy cortos. Demasiado cortos para mi corazón.
Tengan en cuenta que es la primera vez que reseño un manga y que no tengo idea de técnicas de dibujo, así que me centraré en la historia y personajes.

Reseña: El reino de Kouka se encuentra dividido en cinco tribus: la Tribu de Fuego, la Tribu de Agua, la Tribu de Tierra, la Tribu del Viento y la Tribu del Cielo, donde se encuentra el Castillo Hiryuu. En dicho castillo vive la familia real, el Rey Il y su hija, la princesa Yona.

Yona es una chica de dieciséis años a la que lo único que le importa es su cabello inusualmente rojo y su primo y enamorado, Soo-Won. Después de su décimo sexto cumpleaños, el rey Il es asesinado y Yona debe escapar junto a Hak, su guardaespaldas y amigo de la infancia, antes de que también la maten a ella. Vagan un par de días y se dirigen a la Tribu del Viento, de donde Hak es general, para refugiarse. Pero ninguno de los dos planea quedarse mucho tiempo. Ambos están dolidos y enojados por la muerte de Il y la traición que sufrieron. Deciden seguir viajando hacia las montañas donde se esconde un sacerdote para que les ayude en la elección de un camino a seguir. Ik-Soo, el sacerdote, les habla de una profecía donde la reencarnación del rey Hiryuu deberá buscar a los cuatros dragones de la leyenda para que el dragón rojo (que una vez fue Hiryuu) renazca.
Yona y Hak no creen mucho en la profecía, y menos que Yona sea la reencarnación de Hiryuu, a pesar de compartir el color de su pelo. De todas formas parten en busca de los dragones con Yoon, el ayudante de Ik-Soo, para que los ayuden a protegerse de los asesinos de Il que no quieren que la heredera legítima del trono viva. En el viaje se encontrarán con realidades diferentes a las que Yona estaba acostumbrada, comprende que la gente odiaba a Il porque se están muriendo de hambre en las calles. Comprende lo ciega que estuvo y quiere ayudar, desde su posición, a que su país, al que tanto ama, renazca.

Opinión personal: Me encantó. Lo amé. Simplemente eso. Después de que ya haya pasado la mitad de un año, sigo enamorada tanto del anime como del manga. ¿Qué hace que lo ame tanto? Supongo que es difícil de explicar de forma que se entienda, pero en pocas palabras: Akatsuki no Yona me hace feliz. Me encariñé muchísimo con los personajes, más que nada con Yona, Hak, Yoon, Jae-ha, Kija, Shin-ah y Zeno. Más allá de eso, me parece que la historia tiene una ambientación hermosa, como del Japón antiguo, y aunque la base de la de la historia no es muy complicada, funciona de maravilla, te atrapa, tiene muchas escenas de humor, los personajes son increíbles.



Vayamos despacio.

La historia es, como dije, sencilla pero está bien estructurada y bien narrada. No te lo dicen todo de golpe, pero tampoco se pretende dejar con la duda al lector todo el tiempo, aunque hay aspectos de la profecía que aún no están claros, que no han sido descubiertos en estos 23 tomos. La historia en sí me sugirió mucho a Japón, obviamente, por todo esto de los dragones, que comúnmente se ven en las películas u otros animes. Es un mundo que me gustó bastante, pocas veces me he sentido tan a gusto con la creación (o adaptación, como quieran) de un universo; incorporé la idea enseguida (los kimonos me encantan). El ritmo no es tan bueno como esperaba… es lo único que debo criticar. Al principio la historia agarra mucho vuelo, y uno espera que siga así, pero se toma su tiempo para presentarte a los dragones, a diferentes lugares de Kouka, etc., el problema es que hay tomos con mucha acción de pronto y otros que son más tranquilos. No está mal, sólo opino que la autora pudo distribuir eso mejor.
Hay muchos elementos que me encantan particularmente, además de los personajes y la ambientación, y uno de ellos es el humor. Es un humor bastante bobo e infantil a veces, pero me saca mis carcajadas. Más que nada los momentos chibis.

Antes de pasar a los personajes quiero hablar del dibujo. Y si, no sé nada sobre dibujo a pesar de estar en el Bachillerato artístico (malditos profesores). Pero sí quería decir que me parece un dibujo muy limpio, sencillo (para el que sabe dibujar) y no sobrecargado. Seguido me pasa que hay muchos elementos en la página y eso no me permite entender en su totalidad lo que está pasando. Quedo como: “¿Dónde está su cabeza?”. En este manga, aun en las escenas de acción se entiende lo que sucede. Además, los personajes son hermosos, esta vez hablando de estética, todos ellos son, a mi parecer, bastante diferentes entre sí, los reconoces porque todos tienen algo que los diferencia de los demás. (Dejaré muchas fotitos).



Personajes…

Yona es la princesa del reino de Kouka, pero no se interesa mucho por lo que pasa a su alrededor, sólo que sucede dentro de su castillo. Es bastante solitaria, pues nadie la tiene en cuenta para tomar ninguna decisión y la creen bastante superficial y boba. A Yona no le gusta su cabello rojo, para nada, no conoce a nadie más que lo tenga de ese color, y además no puede controlarlo, siempre lo tiene alborotado. Sólo ha tenido dos amigos en toda su vida: Hak, quien ahora es su guardaespaldas, y Soo-Won, su primo y con quien quiere casarse algún día. La muerte de su padre y el tener que escapar de todo lo que ella conoce la desestabiliza y le cuesta varios tomos poder comportarse de forma normal, de hecho hasta el tomo 23, que es donde se quedó la historia, Yona sigue temblando al oír el nombre de su padre, algo referido a su muerte o su asesino. Es algo que ella no puede dejar, a pesar de que le duele, sigue aferrándose a lo que conocía a la vez que va avanzando en su vida. Se podría decir que de forma exterior avanza, pero que en lo más hondo de su corazón sigue siendo esa chica que vio como asesinaban a su padre. Vemos que hay un gran avance en el personaje, Yona deja toda las nimiedades que le preocupaban en el castillo y decide comenzar a entrenar con el arco y flecha para poder defenderse y poder crecer. 
A medida que ella ve todas las cosas que pasan en Kouka, quiere seguir creciendo y aprendiendo, para poder ayudar, para poder, de alguna forma, redimirse por no hacer nada en sus dieciséis años. A medida que viaja junto a Hak, va sintiendo cosas por él, cosas que no quiere admitir, pues Hak es el chico que siempre peleaba con ella porque le divertía hacerlo. Por supuesto que siempre lo quiso como un amigo, pero no entiende exactamente qué es lo que está sintiendo ahora, porque en parte sigue amando a Soo-Won. La idea de Yona de reclutar a los cuatro dragones y de entrenarse a sí misma no es solamente para defenderse ella, más que nada lo hace para no ser una carga para Hak y poder defenderlo.
Con respecto a los dragones y Yoon, es muy cariñosa y los considera su familia, deja que la protejan pero también quiere protegerlos. De a poco va aceptando la profecía.





Hak es el general de la Tribu del viento y es llamado la Bestia del Trueno, ya que cuando agita su alabarda es invencible, puede incluso contra todo un ejército él solo (un ejército medio pequeño), tiene muchísima fuerza y aguanta más que las personas normales las heridas o el dolor. Deja la Tribu del Viento cuando el rey Il le pide que sea guardaespaldas de Yona. Hak acepta, aunque sin muchas ganas, ya que le parecerá una tortura estar cerca constantemente de la chica a la que ama, principalmente porque sabe que ella ama a su mejor amigo, Soo-Won, y que lo más probable es que se casen y reinen Kouka juntos. Creo que la traición que sufren Hak y Yona le duele mucho más a él, Yona lo acepta de alguna forma, con el tiempo va librándose del dolor, pero Hak no puede controlarse, en una ocasión Jae-Ha tuvo que ponerse en medio para calmar a Hak, pues la ira que siente es demasiada.
Hak is not pleased...Es muy celoso respecto a Yona, pero enseguida se hace muy amigo de Yoon y los cuatro dragones, y a pesar de que pelee mucho con Kija al principio, daría su vida por cualquiera de ellos.
El amor que siente por Yona parece que va a matarlo a veces, sabe que ella siente algo por Soo-Won aun, y está seguro de que no siente nada por Hak, a pesar de que muchas veces hace o dice cosas que le hacen pensar lo contrario. Más allá de eso, sí desea algo con ella, pero no quiere tampoco presionarla.

Pasemos a Yoon. Yoon es un chico guapo, dicho por él, que cuidaba de Ik-Soo hasta que este lo exhorta a unirse a al viaje de Hak y Yona para que pueda viajar, conocer nuevas tierras y además aprender mucho, ya que Yoon es un autodidacta. Él tiene el papel de madre dentro del grupo, todos saben que de no ser por él estarían muertos. Es quien cocina, de  forma deliciosa, quien maneja el dinero, el que remienda la ropa, el que los cura y cuida siempre que se lastiman o enferman debido a su inteligencia y a los conocimientos que ha adquirido de medicina y plantas. A pesar de que no sabe pelear, de que no tiene ni siquiera un arma, es muy útil en batalla, sabe mucho de explosivos y de tácticas que podrán ayudarlos. Es el personaje serio del grupo, Hak es bastante serio pero siempre está molestando a los demás, en cambio Yoon, aunque se ríe mucho, es el que pone orden cuando es necesario. Ya avanzados algunos tomos el resto del grupo comienza a llamarlo “madre” o “mamá”. Supongo que dicha actitud se debe a que tuvo que crecer bastante rápido, por su falta de padres y porque vivía en un pueblo hambriento y tuvo que aprender a sobrevivir solo, hasta que llegó Ik-Soo.



Continuemos con los dragones, en el orden en que se unen al trío.

Kija es el dragón blanco, cuyo poder reside en su mano derecha. Esta puede hacerse enorme y está llena de escamas y termina cada dedo en garras, tiene una fuerza increíble que puede llegar a matar a alguien de un sólo golpe. A pesar de su fiereza en batalla, fuera de ella es una persona muy dulce e inocente, en muchos casos hasta se comporta como un niño: en el amor y con los insectos, a quienes teme. Fue criado en la aldea del Dragón Blanco, donde todos sus habitantes adoran a los dragones y esperan ansiosos la llegada de Hiryuu, casi como un culto. Tratan a Kija, y los Dragones Blancos que lo precedieron, como sus líderes. Kija creció rodeado de todas estas comodidades, y las consecuencias de pasar a vivir en carpas y dormir en el suelo se transmiten en los primeros tomos; además, él ve a los dragones, y lo relacionado con ellos, como algo sagrado, principalmente a Yona, y no entiende por qué las otras personas no. Daría su vida por Yona, y también por sus amigos, entiende que su misión en la vida es servir a Hiryuu y es lo único que su corazón desea.
























Shin-ah es el dragón azul, su poder reside en sus ojos, pero no está muy claro en el manga ni para él o sus amigos lo que puede hacer. Trataré de explicarlo según lo que yo entendí: Shin-ah puede ver a largas distancias, pero cuando activa su poder también puede ver el interior de las personas (o algo por el estilo) e hipnotizarlas, él se imagina (por ejemplo) que le está cortando la pierna a su víctima y esta así lo cree, por lo que siente realmente que ya no tiene una pierna; lo mismo pasa en el caso que Shin-ah ponga atención en el corazón de su víctima, esta siente o cree que su corazón se paraliza, por lo que en la realidad, en el ámbito físico, su corazón se detiene y muere. Creo que es el poder más mortífero de todos. El problema para Shin-ah es que después de utilizarlo, su cuerpo se paraliza y no puede moverse por un rato. Al contrario de Kija, Shin-ah creció en una aldea donde odian el poder del Dragón Azul y creen que este está maldito, nadie quiere al Dragón Azul. En el caso de Shin-ah quien lo cría es el Dragón Azul anterior, Ao, que también cree que su poder está maldito e intenta educar a Shin-ah lo mejor que puede, ya que no él no ha sido educado ni tratado bien en su vida; lo exhorta a no utilizar los poderes del dragón, pero sí le enseña a utilizar la espada, y Shin-ah se vuelve un asesino silencioso y mortal. El dilema está en que Shin-ah, como nunca tuvo permitido usar ni aprender de sus poderes, no sabe controlarlos y a veces se excede en su uso.
No habla mucho, dice siempre muy pocas cosas, porque realmente no tuvo nadie quien le hablara o quisiera antes, salvo Ao. Yona es la primera que lo reconoce como una persona y le habla de lo segura que se siente a su lado, algo que ningún aldeano soñaría en decirle, por eso Shin-ah decide unirse a su grupo: porque con Yona y los demás se siente querido, se siente alguien, siente que es merecedor de un nombre, debido a que hasta el momento de conocerla no tenía uno. A pesar de su silencio y mortalidad, es muy cariñoso con el grupo. Lleva una máscara, que los aldeanos le pusieron para no verle los ojos (y que todos los Dragones Azules usaban por ese mismo hecho) que da lugar a escenas muy graciosas con Jae-ha, que siempre quiere ver sus preciosos ojos.
Su compañera siempre fue una ardilla a la que llamó Ao, pero que Yona le dice que debería llamarse de otra forma, ya que es hembra.










Seguimos con Jae-ha. Él es el Dragón Verde, su poder está en su pierna, repleta de escamas verdes como las blancas del brazo de Kija, puede saltar tramos muy largos, de kilómetros y kilómetros, por lo que muchos creen que su poder en realidad es volar, además de que en dicha pierna tiene mucha fuerza. Al contrario de las historias de Kija, Shin-ah o Yoon, que fueron contadas cuando conocimos a los personajes, la historia de Jae-ha se cuenta bastantes tomos después de conocerlo. Si no quieren hacerse spoiler no lean lo siguiente: la historia de Jae-ha es muy parecida a la de Shin-ah, vivía en una aldea que no quería a los Dragones Verdes que nacían en ella y para no llamar la atención porque estos estuviesen saltando por ahí, los encadenaban. Jae-ha odiaba al anterior Dragón Verde por esto, por permitirlo y encadenarlo, por lo que siente mucho rencor hacia todo esto de la leyenda y los poderes, así que cuando conoce a Yona y los demás, no tiene ningún tipo de ganas de unirse al grupo, pero después de que estos lo ayuden en una de sus aventuras, diciéndose que le caen bien y que las inmensas ganas de proteger a Yona es por causa de la sangre del dragón que reside en él, termina uniéndose.
Es bastante pícaro y gracioso, aunque cuando se requiere se pone serio, y su actitud es muy seductora, siendo por quien caen rendidas las mujeres primero; y molesta a Hak todo el tiempo, pues es el único que casó en el vuelo el hecho de que Hak está enamorado de Yona y sabiendo lo celoso que este es por ella, le hace insinuaciones, que ella no comprende o toma por otra cosa, o comentarios que tengan que ver con ella. A pesar de esto, creo que está más unido a Hak que a los demás, como dije cuando reseñaba a Hak, en el momento que este perdió los estribos el primero en reaccionar para ayudarlo fue Jae-ha. De igual forma actúa como un hermano mayor para los demás, ya que en términos de edad (dejando de lado que Zeno tiene miles de años porque se comporta como un niño) es el mayor: Jae-ha tiene veinticinco años, Kija veinte, Shin-ah dieciocho, Hak dieciocho, Yoon quince y Yona dieciséis.
El problema de su edad lo preocupa bastante aunque él lo niegue, detrás de toda su alegría constante por la belleza que lo rodea y por la suya propia, siente miedo de morir. Los dragones mueren muy jóvenes, y tener veinticinco años es acercarse peligrosamente a la línea entre la vida y la muerte; su antecesor vivió doce años después que él naciera, algo sumamente extraño, ya que por lo general mueren alrededor de los seis años o menos después de que nace un nuevo dragón en su aldea (esto se aplica tanto para el Dragón Verde como el Dragón Azul y Blanco), pero Jae-ha no cree que esto signifique nada, más bien un caso extracurricular.


Llegamos a Zeno. Él es el Dragón Amarillo, su poder es el de la regeneración, y después de que se regenera (cuando ya lo han herido) su piel se vuelve como acero y tiene la fuerza de Kija en los brazos y la de Jae-ha en las piernas. Su historia también es spoiler, ya que aparece en el manga veinti-algo si mal no recuerdo, o cerca. En fin, el caso de Zeno es bastante peculiar entre los dragones, ya que él es el único Dragón Amarillo que ha existido, es inmortal, estuvo, junto a los primeros dragones de la leyenda, en los comienzos del reino Kouka y fue cercano al propio rey Hiryuu. Después de la muerte de este y sus amigos dragones, se dedicó a vagar hasta que supo de la reencarnación del Dragón Rojo, es decir, del nacimiento de Yona.
Se une al grupo por su cuenta, ellos no van en su búsqueda, sino que Zeno viene a ellos. Su comportamiento es más bien el de un niño aunque aparenta tener diecisiete años, llamándose todo el tiempo por su propio nombre, hablando de él en tercera persona; es un amante de la comida, por lo que para Zeno esa es la solución a todo y en cuanto ve comida su alegría es tremenda. A pesar de toda su niñería, de la misma forma que Jae-ha, en los momentos en que se requiere adopta la actitud y sabiduría correspondiente a su edad.
Su único deseo es ver feliz a Kouka, ya que luchó incontables batallas por ella, y poder regresar con Hiryuu y sus hermanos, los primeros dragones. Al contrario de Jae-ha, Zeno ve la muerte como una liberación.




Terminemos con Soo-Won. Él es el primo de Yona y mejor amigo de Hak, desde niños los tres fueron inseparables. Su padre era el comandante de Kouka y llevó a su país a numerosas y victoriosas batallas, con lo que lograron la expansión de Kouka y la dicha de la gente, que estaba en una época muy provechosa, al contrario de lo que hizo Il cuando fue coronado. Soo-Won no sabe que Yona está enamorada de él a pesar del montón de insinuaciones que le hace, y Hak cree que Soo-Won corresponde estos sentimientos, pero yo no estoy segura y el manga no lo aclara mucho. Seguramente todo lo que diga a continuación es spoiler: al parecer Il mató a su hermano, es decir, el padre de Soo-Won; la gente cree que Il no es digno de su puesto, ya que ha llevado a Kouka a la ruina y Soo-Won piensa lo mismo. 
Lo que él realmente desea es llevar a Kouka a la grandeza de antes, quiere ayudar a las personas a tener una vida mejor, sabe que los habitantes mueren de hambre en las calles y que nadie está haciendo nada. Con su mandato logra muchas cosas importantes, logra, más que nada, ganarse a su pueblo porque este se da cuenta de lo que está haciendo, y también a los generales de las cinco tribus, que lo apoyan. Muchas personas odian a Soo-Won por lo que hizo, pero yo sí lo entiendo y lo apoyo. Me vale una mierda lo que haya pasado con Il, es cierto que Yona no se merecía nada de eso, pero pensando en cómo era ella en ese momento: una egoísta que sólo pensaba en sí misma, tampoco me hubiese yo detenido por ella, a pesar de que Soo-Won la quiere muchísimo, y también a Hak. Lo importante es que está ayudando a Kouka a no morir de hambre. Soo-Won sabe que hace lo correcto, sin embargo en su corazón carga mucho dolor porque ahora Hak, quien esperaba tener siempre a su lado, lo odia (y él sabía que esto pasaría), y Yona, a quien también quería, no lo odia exactamente, pero sí está terriblemente aterrada de él.
En muchas ocasiones Yona tiene oportunidad de matarlo, de vengar a su padre y decir a todo el mundo que fue él el traidor, pero no lo hace, porque se da cuenta lo bien que el reinado de Soo-Won le hace a Kouka.




La evolución de Yona sobre todo, pero de los personajes en general, es digna de ver. Y también la evolución de las relaciones entre ellos, cada vez este grupo es más unido, y a pesar de que algunos de ellos se llevaban mal apenas conocerse, después se convierten en un verdadero equipo y familia.

En fin, hice demasiados spoilers. El manga me encanta, díganme si yo leyeron o vieron su anime. Y, por favor, si saben de algún anime o manga parecido recomiéndenmelo, si tiene una ambientación similar mejor. Cuando lea unos cuantos tomos más (cuando salgan) seguiré con las reseñas o no, no sé.



¡Nos leemos!



Valentine.